Las avispas (Paravespula spp.) pueden ser molestas al hombre debido a sus dolorosas picaduras. Para personas con una sensibilidad alérgica, inclusive una simple picadura puede ser potencialmente fatal. Viven en nidos construidos comúnmente en el suelo o en los travesaños de madera pertenecientes a los techos de casas, corrales, etc.
Las avispas construyen en nido con trozos de madera, que han raspado de postes o tablas y que en mezcla con la saliva, les dan una consistencia acartonada. Solamente las reinas jóvenes sobreviven el invierno en una especie de fase inactiva. Por ello se ven pocas avispas en primavera. Las larvas que eclosionan de los huevos, puestos por la reina, se desarrollan a obreras, que son responsables por el plagadero de avispas hacia finales de verano y otoño.
Las avispas se alimentan de frutas, jugos, galletas, mermeladas y otras substancias dulces y se las encuentra por ello con frecuencia en la cercanía del hombre.